JUICIO A LA EDUCACIÓN
SANDRA MARTÍNEZ BUENDÍA 4ºC
La educación hoy en día es como una fábrica por la que
pasan miles de alumnos con diferentes características. Sin embargo, dentro de
ella comienzan a diferenciar entre aquellos alumnos que tienen grandes
capacidades y los que no.
Además, en la actualidad los niños se convierten en
robots, y todos salen del ámbito escolar de la misma manera pues les matan la
creatividad limitándose todo el tiempo a
hacer lo mismo, de igual forma que los enseñan a hacer las cosas de una sola
manera. Por ejemplo, cuando dibujan un gato y el niño quiere pintarlo de azul
se le niega puesto que debe de ser marrón, blanco, negro o gris, de tal modo
que nos limitan nuestra creatividad.
Por otro lado, la escuela opta por una serie de
asignaturas como matemáticas dejando a un lado otras que pueden ayudar a
desarrollar los dones de algunos alumnos, pues no todos tenemos las mismas
capacidades, ni sueños, ni fortalezas. Cada
uno de nosotros es totalmente diferente y no se puede optar a un único
objetivo, en este caso la “nota”, puesto que con un examen no se puede valorar
la capacidad que un alumno tiene.
Yo voto por un cambio en la educación, por un
aprendizaje donde los alumnos no estén sentados en fila, por parejas o individualmente.
Por una enseñanza donde no haya un único objetivo, donde se puedan demostrar
todas las capacidades de los alumnos. Una educación de libertad, sin deberes,
sin competición de unos estudiantes sobre otros. Una sociedad donde los
profesores estén bien valorados por su trabajo, con mayores salarios.
Además, destacamos un currículum creado por personas
que la mayoría no saben ni qué es enseñar, no conocen las diferencias, ni
incertidumbres, ni sueños, ni cualquier aspecto que pueden llegar a presentar
veinte alumnos dentro de un aula. Sólo hay que echar la vista atrás, y ver que
todo ha evolucionado menos la educación, pues se sigue ejerciendo de la misma
manera que hace cincuenta años.
Finalmente, la educación es una fábrica donde se
selecciona a los alumnos que siempre acabarán siendo robots, todos iguales, y
desechando aquellos que no llegan a los objetivos impuestos en la educación,
simplemente porque presenten otros dones que no se demuestran dentro del aula.
DEFENSA DE LA EDUCACIÓN
JOSÉ FIDEL GÓMEZ MARTÍNEZ 4ºC
Permítame, Señoría, que catalogue al abogado de la defensa, de hipnotizador. Usted, ha salido aquí con un
ejemplo que evidentemente es imposible, un pez trepando un árbol, ¿y si yo
ahora le digo que con seguimiento y esfuerzo se puede enseñar a nadar a un mono?.
Es cierto, que la
Educación podría mejorar en algunos aspectos, pero lo que no se puede hacer es
catalogar al alumnado de inútil. Siempre se citan los famosos test de inútiles
(Reválida, Pau, Pisa), ¿verdad? Ahora, yo les digo que sí, que son necesarios ya que yo no puedo
considerar a un alumno como superdotado sin tener prueba de ello. Además,
necesitamos ser calificados para tener una guía donde apoyarnos a la hora de
saber que debemos estudiar más y así mejorar nuestro rendimiento en ese
temario. También, se ha comentado que no
podemos explicar a todos las cosas de la misma forma; vea, yo sólo doy una base del tema tratado,
ayudando su entendimiento. Cada alumno debe adaptarse a una explicación, ¿no
cree que la persona que haya entendido la explicación a la primera, se va a
hacer un lío a la vigésima vez que explique lo mismo, pero de diferente forma?
Es verdad que no
tenemos el mismo cerebro, pero lo que sí tenemos todos es la capacidad de
entendimiento y aprendizaje, eso se obtiene a base de una serie de prácticas
formuladas por el propio alumno. Al igual pasa en la capacidad de nadar de un
mono, al principio se hunde, pero a base de ensayos, el mono va a saber
defenderse.
No tengo más nada
que añadir, gracias.

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